martes

Piel como nueva por la exfoliación

Para los admiradores del cuidado corporal, los amantes de tetas y culos, los "corrutos", "robaperas", "sujetafarolas" y demás curiosos; la niña corta y pega un artículo publicado en la web mundo belleza.com, que espero les parezca interesante y tenga mucho que comentar.
Besos a todos mis frikis.

Después del verano es muy común que notemos que nuestra piel se ha quedado sin brillo ya que los excesos de sol, el cloro de la piscina o la sal del mar, suelen resecarla. Es el momento de exfoliarla para retirar las células muertas que se acumulan en la epidermis y así acelerar la regeneración de la piel.
La piel se regenera naturalmente cada 28 a 30 días. Al exfoliar, activamos la circulación, suavizamos la piel y, lo más importante, promovemos la regeneración de células nuevas, lo que fortalece la piel y la provee de elasticidad. Además, la exfoliación contribuye a que las marcas y cicatrices desaparezcan.

Si nunca has exfoliado tu piel o hace mucho que no lo haces puedes comenzar a realizar este ritual una vez a la semana durante el primer mes. Después, debes reducir la frecuencia de las exfoliaciones a una cada quince días porque de lo contrario la piel puede irritarse. Tras realizarlas, debes aplicar una loción hidratante y así te asegurarás una piel saludable y bella. Si tu piel es muy sensible o muy seca debes exfoliar con menos frecuencia: una vez cada tres semanas será suficiente.
¿CÓMO Y CUANDO EXFOLIAR?
La exfoliación es un ritual de belleza muy sencillo: en primer lugar dúchate con agua caliente para que la piel se reblandezca, a continuación aplica el producto específico sobre un guante de lufa o una esponja y para terminar, frota sobre la piel presionando levemente con las manos mientras haces movimientos circulares.

Sin embargo, de nada te servirán estos esfuerzos si sólo los realizas durante unas pocas semanas. La constancia es fundamental si quieres mantener de piel lisa, suave y reluciente.
Hay ciertos momentos en los que nos aprovecharemos de las propiedades de la exfoliación más que otros. Antes de tomar el sol, por ejemplo, es muy adecuado exfoliar la piel porque cuanto más lisa esté la epidermis más uniforme será su bronceado. También es conveniente exfoliar la piel antes de aplicar un auto bronceador ya que este producto sólo actúa sobre la capa superficial de la piel y consecuentemente cuantas más células muertas tenga esta capa más irregular será el color. Sin embargo, si exfoliamos la piel antes estará lisa, nítida y el auto bronceado será uniforme....

domingo

The boss contesta a una pregunta interesante a un comentario anterior

He querido poner esta respuesta en portada por su interés, contestada en el artículo
"Sobre el spinning, nada que no sepan ya mi frikis !!"

Anónimo dijo...
Oye boss ¿a que le llamas tu en el artículo a personas ya maduras?, ¿desde que edad es aconsejable según tu el pulsometro?
25 de enero de 2008 18:21

para mi anónimo:
puesssssss el uso de pulsómetros es aconsejable, siempre, se tenga la edad q se tenga, si eres joven también, motivo, .... muy ocasionalmente, los jóvenes padecen taquicardias, mas q los mayores, eso es q los latidos se te disparan peeeeero no bajan !!! y eso es muy peligroso, es muy dificil de detectar sin un pulsómetro, la sensacion es de q te falta aire, como si hubieses subido una escalera corriendo, y esto después de un buen rato de haber acabado el ejercicio, hasta incluso 1 hora después, hay q ir corriendo a un hospital, ya digo q es muy raro pero q suele pasar, y al q le toca....le toca !! (se dan mas en mujeres q en hombres), y apartir de los 30 años sin lugar a dudas debería ser obligatorio el uso, como curiosidad te diré q en los centros oficiales de spinning, (y el Sato no lo es) está prohibido entrar en las clases sin él, durante la sesión de spinning se debe trabajar el grueso de la clase entre el 70-80% de tu frecuencia cardíaca max. de vez en cuando pasaremos un poco al 85% (como por ejemplo en la series en subida) y solo al final (muy ocasionalmente entre la sesión) q es cuando está la musculatura y el corazón preparado (caliente) en los 1-2-3 minutos finales (depende de la preparación física de cada uno) trabajar al 90-92% de tu frecuencia cardíaca máxima, para bajarla MUY LENTAMENTE en los 2-3 ultimos minutos, y esto si q es muy importante, esos minutos en q mucha gente no le da importancia y personal empieza a abandonar la sala porq cree q ha terminado la sesión, para mí, por mi experiencia q ya va para muchos añitos, son VITALES !!! mucho mas q el calentamiento,

bueno puessss aqui me teneis por si puedo aclarar dudas.....y recordad q el spinning no es subirse a la tarimita , dadle al play y "poné" musiquita !!, como he dicho muchas veces, mis circuitos estan preparados para sacarle el máximo rendimiento físico a 40´de clase, basados en tecnicas de entreno del ciclismo profesional, pero siempre q se use el ya famoso PULSÓMETRO !!
saludos

viernes

La hora Maruji. Parte 2ª

El COME, todas ellas entusiastas del pedaleo, se mira de reojo. Aquello parece una competición de verdad, esperan el pistoletazo de salida y todas quieren el trofeo. Preparadas, miran sus pulsómetros, aunque no sepan utilizarlo. Ellas solo ven un número grande que bien podría ser él número de la ONCE premiado hoy o bien podría ser el número al que hay que mandar un SMS para que te toque un año de hipoteca gratis.

“Buenos días, queridas. Empezamos la clase” truena una voz por el micro. Es el Boss. Ya ha tomado las riendas. Ahora manda él. “La clase de hoy va a ser durilla, pero ya sabéis que la que no pueda o el que no pueda seguirla que se siente, que no hay ningún problema. Y la que o el que venga calentito de abajo que apriete un poquito la palanquita. Hala, que nos vamos.” Todas dirigen la vista a su mano que a cámara lenta se desplaza, baja y pulsa el botón “play” del equipo.

Suena la música, empiezan los primeros bits. PUM, PUM, PUM. Ritmo muy marcado, 70 pedaladas por minuto, de pie en la bicicleta. Aparecen las primeras caras coloradas. En la tercera fila dos señoras discuten en voz baja. “Toñi, yo creo que el cacharro este mío que llevo en la muñeca marca malamente, yo estoy viendo aquí 940 pulsaciones. Y yo creo que eso es mucho.” “Pepa, eres un poquito apretá. Que eso es la hora, hija, que son las diez menos veinte. Dale al otro botoncito para que te marque el corazón. Y no me hables más, que me desconcentras.”

El reducto varonil se defiende como puede, ninguno lleva pulsómetro. Eso es una mariconada. Si el viejo puede pedalear, yo también puedo… y mejor, por mis cojones. Sus caras todavía no denotan mucho esfuerzo. A ver si va a ser verdad. Lo cierto es que no lo hacen mal. Buena cadencia, bien equilibrados. Quizás el sillín un poco bajo.

El ritmo comienza a acelerarse, de estar de pie pasan a estar sentado. Y de 70 bpm se pasa a 120. Comienzan a aparecer los primeros sudores en todas las filas. Y se oyen comentarios. “Ni con mi Paco sudo yo como lo hago aquí. Y eso que mi Paco es mucho Paco. Que entra a matá como los toreros y allí estoy pá recibirlo y calmarlo.” “Que ganas de un cigarrito, niña. Ahora cuando acabemos esto nos tomamos un cafetito y una cuña de chocolate en la cafetería. Pero rapidito, que el otro día Antonio casi me pilla con el cigarro en la mano. Me dio un apuro”. El Boss sonríe, recuerda el momento. Parece que con la música tronando en la sala no se escuchan las conversaciones, pero es mentira. El oído es capaz de filtrar la conversación de dos personas.

El ritmo sigue subiendo, llevan ya más de 20 minutos de clase. Algunas que venían con las rebecas del chándal puestas se han quedado con la camisetilla de licra marcando “líneas”. Algunas incluso traen muñequeras y cintas del pelo al estilo Jane Fonda de los años ochenta.

Uno, dos, uno, dos, uno, dos. Ahora un temita con series. Nueve series en cascada con intervalos muy cortos de descanso entre ellas, para recuperar brevemente. Las piernas a tope, los cuadriceps super congestionados. Bombeando sangre y el corazón a mil por hora. Algunas de nuestras heroínas han optado por sentarse, ritmo demasiado intenso, otras permanecen ahí, con los ojos cerrados y apretados los dientes. Para ellas serán las medallas.

La clase continua, con más o menos sufrimiento. Se alternan las subidas con los llanos, pero nadie se para, nadie sale de la clase, nadie abandona. En la “hora Maruji” nadie sale por la puerta de la sala sin estar expuesta a un consejo de guerra. El tribunal lo forma el comando COME, ellas son duras y por tanto tú también. Antes que abandonar, la “muerte del caballo”. La clase finaliza, por fin, con una suave sesión de estiramientos, y las caras comienzan a relajarse.

Nuevamente surgen los comentarios. Antes no podían hablar. “Menos mal, se acabó, todos los días digo que no vengo y al final aquí estoy, como una tonta, sudando como una cochina y sufriendo, pero es que no puedo evitarlo”. “Es que el Antonio lo hace tela de bien. ¿Tú te has fijao en como está el tío pa la edad que tiene? A mi me han dicho que tiene ya 55 años”. “Anda ya. Con 55 años no se puede estar así. Si el tío está como un garrote”.

Fuera ya de la bicicleta y con la música puesta al mínimo un batallón de féminas se dirige al Boss para preguntar y comentar. Que sepan las féminas que eso lo hace la hora friki desde tiempos inmemoriales. Que la hora friki creó escuela y sus componentes se enorgullecen de ello.

jueves

Sobre el spinning, nada que no sepan ya mi frikis !!

Beneficio para el corazón
El spinning es un deporte prácticamente aeróbico, el trabajo aeróbico moderado y continuado es el más aconsejado para el músculo más importante de nuestro organismo, el corazón. El corazón con el ejercicio aeróbico se agranda, se fortalece y pierde parte de la grasa que lo cubre. Por lo que cada latido es hace más potente y puede trasladar más sangre al resto del organismo. Como resultado se produce una bajada de la frecuencia cardiaca en reposo, lo que mejora la economía y la eficacia de nuestro corazón. Por la misma razón aumenta el calibre de las arterias coronarias, causantes de muchos de los problemas del sistema cardiovascular. Ayudando así al corazón a ser más eficaz en el trasporte y retorno de la sangre y se reduce la tensión arterial, por lo que todo el organismo sale beneficiado.

La frecuencia cardiaca en el spinning
A fin de realizar con tus alumnos un trabajo seguro y eficaz el control, ya sea de forma continua con un pulsometro o manualmente cada poco tiempo, de la frecuencia cardiaca (pulsaciones por minuto) es imprescindible. Quizás en un atleta joven no hace falta ya que aunque sobre pase los valores del trabajo aeróbico no correrá ningún peligro. En cambio en una persona madura con una baja forma física, controlar que el alumno trabaje en las pulsaciones adecuadas nos evitara primero sustos, tales como desfallecimientos, etc si no cosas más graves, segundo conseguiremos que el alumno o alumna trabaje más tiempo mas cómodo y sin llegar a la extenuación que puede provocar que pierda motivación y no vuelva a dar una clase nunca. Para un adulto en baja forma física llegar a la extenuación le provocara un malestar general durante unos días, no le provocara beneficios fisiológicos y si conseguiremos que se piense mucho eso de seguir dándole a los pedales. La mejor forma de evitar esto es con el control de la frecuencia cardiaca y con el conocimiento del rango de trabajo ideal para cada alumno. Parece más complicado de lo que es, pero solo tenemos que dedicar unos minutos al nuevo alumno para realizar unos sencillos cálculos e informarle a que pulsaciones tiene que trabajar y de cuales nunca tiene que sobrepasar.

Spinning y los cambios de ritmo
Una de los principios del entrenamiento con la bicicleta estática en las clases denominadas “Spinning” son los cambios de ritmo. Es un método de entrenamiento para mejorar la resistencia aeróbica “el fondo” muy empleado desde hace muchos años en casi todos los deportes. Es muchas veces denomina por el anglicismo “FarLek”. Se trata de pedalear un tiempo determinada incluyendo varios cambios de ritmo de la frecuencia de pedaleo y de la resistencia que van desde el un trabajo ligero a un trabajo intenso, siendo la media final del trabajo, dentro del margen del aeróbico medio. En atletismo cuando los corredores trabajan con cambios de ritmo, lo que aumentan es la intensidad del trabajo, con el spinning tenemos dos variables con las que jugar, la frecuencia del pedaleo y la resistencia al movimiento que ofrecen las bicicletas y una técnica de ejecución que es sentado o de pie. Esto nos da muchísimo juego a la hora de hacer eficaces y entretenidas nuestras sesiones....................

sábado

La Hora "Maruji". Parte 1ª

El gimnasio ha despertado antes del amanecer, como siempre, en esta época. Su mole imponente brilla a estas horas destacando sobre cualquier edificio de los alrededores, incluida la estación de trenes. Ha abierto sus puertas y poco a poco los socios habituales de las horas tempraneras comienzan a entrar en procesión. Poco a poco el bullicio se apodera de los vestuarios y de las salas. Gente yendo y viniendo, aprovechando el poco tiempo del que disponen porque luego, en la mayoría de los casos, lo que toca es el “curro”.

La sala de cardio va cogiendo cuerpo, bicicletas ocupadas con señores leyendo el periódico, cintas de correr con señoras andando (sí, andando), elípticas para las/los más atrevid@s y las máquinas de remo vacías (como casi siempre). Las salas de pesas para los adictos a levantar hierro tardan en desperezar. Y, por supuesto, por las salas superiores a esas horas no transita nadie, pero falta muy poco, muy poco para que se produzca la avalancha matutina del grupo de féminas de mediana edad más famoso del Sato.

Son las 9 de la mañana. Deprisa y corriendo entran dos señoras por los tornos del gimnasio con los bolsos de deporte a las espaldas. Una de ellas se queda atascada en el torno porque la bolsa no pasa, demasiados atuendos. Cuando por fin consigue acceder le dice a la chica de la recepción “Buenos días, muchacha. Que no llego, que no llego, como siempre no llego. ¿Qué hora tienes, mi alma?”. “Es temprano, señora, son las nueve y cinco.” La mujer sobresaltada contesta “¿Las nueve y cinco? Antonia corre, baja las escaleras saltando que no llegamos a la clase del Antonio. Y eso no me lo pierdo yo por ná del mundo. Que yo quiero mi sitio en la primera fila, enfrente de él, pá mirarle las piernas. Corre chiquilla, corre. Que tenemos que cambiarnos, que yo me tengo que “quitá” la faja que llevo puesta. Y hay que ponerse el cacharro ese en la mano, ¿cómo se llama? ¿el pipómetro?¿el punterometro? Da “iguá”, luego se lo preguntamos. Corre, Antonia, corre, que no llegamos.”

Son las 9 horas y 25 minutos de la mañana. En la sala de spinning hay un barullo que empieza a ser habitual a estas horas. Cuarenta señoras de mediana edad (digamos entre los 30 y los 55 años) esperan impacientemente a que llegue el maestro spinner. Se reúnen para pedalear bajo las órdenes del Cappo de la sala. Como será la cosa que esta hora mañanera ya tiene nombre oficial; “la hora Maruji” (por supuesto, con todo el cariño y el respeto que se merece). Una hora en la que, según mis fuentes, sus asistentes empiezan a dar el “do” de pecho. Empiezan a “profesionalizarse”, a usar pulsómetros, a utilizar zapatillas con calas, a seguir las indicaciones del que manda.

Empiezan a escucharse los típicos comentarios matutinos: “¿Te gustó el capítulo de ayer de Arrayán? Se está poniendo la cosa seria.” “Mis niños me comen mú poquito, ná más que quieren porquerías. Garbanzos, no hija, no; pero pizzas y hamburguesas las que quieras. De verdad, no se que voy a hacer.” “Es que no tengo tiempo pa llevar a mi Rafael al colegio. Como me coja un poco el atasco es que no llego al gimnasio. Hoy he tenido suerte, menos mal.”

Mil historias habituales, oídas y conocidas por todos.

La primera fila es rápidamente ocupada por las más avezadas del grupo, es el Cuerpo de Operaciones de Marujas Especial (el COME). Con la toalla al cuello preparan sus bicicletas. Regulan la altura de los sillines y de los manillares, comprueban la distancia del sillín al manillar. Para ellas no hay cuartel, siempre con el cuchillo entre los dientes. Mientras tanto, continúan hablando entre ellas. El resto de la clase se va ocupando progresivamente. Hay bicicletas vacías pero hay una buena entrada, como se diría en el argot taurino. Se divisa a un pequeño reducto de varones, especie en extinción a estas horas, al fondo de la clase. Parece que no quieran mezclarse con las demás. Peor para ellos.

Mientras tanto, Antonio ocupa el lugar que le corresponde, ajusta el equipo, ajusta la bicicleta, comprueba que el micrófono responde, da unas pedaladas para estirar las piernas, para desentumecer el cuerpo. Hoy toca la sesión número 4, con un final durillo de 7 minutos en subida y un último minuto de infarto. Para empezar el día no está mal, teniendo en cuenta que luego tendrá que dar dos clases más, una al mediodía y otra por la noche, con sus “niños” como él cariñosamente los llama.

Continuará.


jueves

Viejo !!!

ocurrió esta semana, después de una interesante sesión de spinning,
en la clase hubo un cuarteto nuevo en el fondo norte, jóvenes charlatanes ellos, unos ventitantos años, no pedaleaban ni "patrás", dando mas bandazos q el paso palio de la Macarena !!,

the boss se va al vestuario, dada la hora había poca gente, las conversaciones se oyen con facilidad, ya en la ducha, en la contigua, se oye decir......... "vaya caña q ha dado el viejo " !!,

the boss esbozó una sonrisa con el comentario q acababa de oir, ......pero por unos segundos pensó q .......efectivamente....tal vez..........esté viejo ya !!, una vez duchaito, un poco pensativo por el comentario, junto a la taquilla, the boss se miró en el gran espejo q tiene delante y pensó...............VIEJO? .....VIEJO TU, Y TU PADRE, SO NIÑATO ZAMPABOLLOS, QUE EL VIEJO TE ACABA DE ROMPER LAS PIERNAS !!! EA PO TOMA !! CON UN PAR........

..........mira q llamarle viejo al boss !!!
habráse visto.............q osadía !!!

martes

Sube la palanquita !!!

Sube la palanquita !
Al 70% menos no me vale !
A tope, por encima del 85% !

Pero, qué está diciendo el tio ese de la tarima ?
Jerga de ciclistas ? Spinners experimentados ?
Qué son esas hojitas de color azul y rosa de las paredes ?

La frecuencia cardíaca (Fc) es un parámetro usado habitualmente para determinar la intensidad de un entrenamiento o actividad. Esta Fc de entrenamiento se suele dar en porcentajes relativos al máximo de la frecuencia cardíaca y hay varios métodos para calcular la intensidad óptima de un entrenamiento.

Cálculo de intensidad a partir de la Fc máxima: un método sencillo para calcular Fc máxima es restando a 220 nuestra edad, así, si mi edad es de 30 años, la Fc máxima será de 190 pulsaciones por minuto (ppm), y por tanto el 100% de mi Fc máxima es 190 ppm y el 50% sería 95 ppm.

Fc máxima = 220-edad

A partir de aqui, si nos dicen que debemos de trabajar al 70% de la Fc máxima, para averiguar las ppm. Sólo tendremos que multiplicar por 0,7 nuestra Fc máxima. Siguiendo el ejemplo anterior, si quiero trabajar al 70% y tengo 30 años el resultado sería de 133 ppm.

70% Fc máxima = (220-edad)·0,7 = 133 ppm

Intervalos más usuales:


  • Intensidad muy ligera: 50-60%, útil para trabajos de recuperación, calentamiento y vuelta a la calma.

  • Intensidad ligera: 60-70%, zona para el trabajo base de la condición física, muy recomendable para personas que se inician en el deporte y quieren comenzar a construir una buena forma física. También utilizado en los inicios de temporada de deportistas para comenzar a asentar una base de trabajo.

  • Intensidad moderada: 70-80%, intervalo en el que ya se persigue un objetivo de mejora en rendimiento y se trabaja la eficiencia del corazón (utilización de menos energía para la realización de un esfuerzo). Recomendado para ciclos de entrenamientos preparatorios a pruebas de media-larga duración donde se establece una base aeróbica importante.

  • Intensidad dura:80-90%, este ya es un escalón donde la fatiga aparece de manera manifiesta. El objetivo es ganar rendimiento y poder trabajar a alta intensidad a lo largo del tiempo. No se recomienda para programas donde se busque mejora de la condición física básica, para eso están los escalones anteriores. Este es un intervalo más para entrenamiento específico y anaeróbico que persigue rendimiento en el deporte.

  • Intensidad máxima: 90-100%, es el máximo esfuerzo que pueden tolerar nuestros órganos y músculos, se trata de un entrenamiento anaeróbico que debido a su dureza sólo se puede aplicar en breves periodos de tiempo (menos de 5 minutos). Las agujetas y el ácido láctico harán aqui de las suyas, por eso sólo es recomendable para entrenamientos específicos de deportistas que busquen rendimiento.

Otra manera más exacta de calcular la Fc de entrenamiento es usando la frecuencia cardíaca de reserva, mediante la fórmula de Karvonen. La frecuencia cardíaca de reserva tiene en cuenta no sólo la Fc máxima, sino también la Fc en reposo, por tanto se ajustará aún más a nuestras posibilidades y estado de forma.

Fc de reserva = Fc máxima-Fc en reposo

Yo puedo entrenar con mi amigo que también tiene 30 años y los dos tenemos la misma Fc máxima, en este caso sería 190 ppm, pero si mi Fc en reposo es mayor que la de mi amigo, ya las intensidades de esfuerzo serán diferentes, porque él tendrá mayor Fc de reserva y yo menos, por tanto su rango de pulsaciones de trabajo es mayor, y mientras yo necesitaré 150 ppm para un esfuerzo, él necesitará menos, por tanto ahí reside la importancia de la fórmula de Karvonen para el cálculo de intensidad. Veamos un ejemplo para calcular intensidades del 70%:

70% Fc de trabajo según Karvonen = (Fc máxima-Fc reposo)·0,7 + Fc reposo


domingo

Y todo sigue igual... O casi todo

Y otra semana que se pasa. Y todo sigue igual. O casi todo.

En la sala sigue sonando ese equipo de pandereta procedente de la tienda de los horrores cuya renovación está pendiente desde nació la infanta Leonor, las bicicletas siguen estando en un estado lamentable y cualquier día tendremos que dar cuenta de alguna desgracia, la hora friki sigue contando con sus más acérrimos seguidores todos en primera fila marcando y tirando del resto de la clase, se mantiene la cervecita víspera de fin de semana y encuentro de todos aquellos miembros frikis que se precien. Las niñas de la recepción siguen siendo las mismas, dan las mismas contestaciones y casi nunca te dan los buenos días, se dedican a darle a la sin hueso entre ellas (que nadie saque conclusiones erróneas de esta última frase). El aparcamiento para las bicicletas del garaje sigue siendo infame. ¿Cuántas caben? ¿Cinco? ¿Seis? ¿Siete? Está claro que los “amos” del gimnasio lo que quieren es que haya pocas bicis y muchos coches que son los que dejan los cuartos, la guita, el parné, el taco, los billetes.

Sin embargo hay cosas nuevas. Hay más gente que se apunta en estas fechas al gimnasio. Esa conciencia mala que les recrimina el haberse puesto ciegos de gambas, queso y jamón. Y ahora toca penitencia. Penitencia corriendo, dando pedales, sudando, levantando hierro, jugando al pádel. Hay que bajar esos kilitos malditos que adornan esas cinturas, que no permiten abrocharse el cinturón como antes, que no te dejan calarte los pantalones como antes. ¡¡Ay, ay, malditas navidades!! Pero para eso está el gimnasio. Todos los días una hora, como mínimo, bicicleta 20 minutos y luego a correr en la cinta otros 15 minutos y luego a la sala de pesas otros 40 minutos. Y esto ¿hasta cuando? Pues hasta que se acabe el mes de enero y la conciencia se haya adormecido o hayamos sido capaces de engañarla. ¿Disciplina? ¿Para qué? Nos engañamos viniendo durante 15 o 20 días. Hacemos que la cuesta de enero sea una rampa del 20%, pagando una matrícula y una mensualidad que sale por un huevo y parte del otro, pero así conseguimos descargar nuestras conciencias. Prácticamente la sensación es la de adelgazar cuando pagamos por apuntarnos. Ya está. Objetivo cumplido. Fuera esos kilos que sobran. ¡¡Por los cojones!!

Se ve a la gente con sus atuendos nuevos, zapatillas relucientes, chándales impecables, mp3, mp4, i-pods, algún que otro carca con sus auriculares y su reproductor de CDs, pulsómetros (muchos de los que los llevan no saben siquiera lo que miden y para que sirven pero…), todo ello regalo de los Reyes Magos. Es todo un espectáculo de luz y de color. Bueno, de luz no, pero sí de color. Un espectáculo fugaz, un espectáculo que dura apenas una o dos semanas, el tiempo suficiente para anestesiar a esa mala conciencia. El tiempo suficiente para que muchos de los que deambulan por el gimnasio se den cuenta de que ese no es su sitio, de que allí no pintan nada y de que si en navidades han ganado algunos kilitos pues alguna razón habrá para ello. Razón divina o terrenal ellos prefieren sufrir poco y disfrutar mucho. El tiempo les pasará factura y el arrepentimiento tardío no les valdrá de nada. Eso sí, escucharán como sus conciencias ríen a mandíbula batiente, descojonándose de ellos y recordándoles todos los días lo que en su momento debieron haber hecho y no hicieron.

miércoles

Número simbólico

Para los amantes de las estadísticas,
de los números,
de las cuentas hacia atrás,
de las cuentas hacia adelante,
de los q les gustan partir de cero,
para los q gustan empezar etapas,
hoy es un día para ellos,
un día especial para the boss también,
esta tarde en la clase de las 19,30 the boss dirigirá su clase de spinning nº 500 en el Sato !!!

Mis deseos son poder dar otras 500 más en compañía de mis "niños", mis frikisfans, porq sin vosotros the boss no hubiese alcanzado ese número !!
Gracias por estar ahí !!!

lunes

Queridos Reyes Magos

Queridos Reyes Magos:

He decidido escribiros esta carta para ver si vosotros, que pertenecéis a la realeza y que, por tanto, manejáis “guita” atendéis mis peticiones. Como sabéis de sobra, hace ya un tiempo que soy socio del gimnasio “Sato Sport”, el mayor centro deportivo y de culto al cuerpo que hay en Sevilla y alrededores. Puesto que mi intención es continuar ahí algunos añitos más os voy a pedir una lista de cositas a ver si es posible. Realmente lo que os pido son nimiedades pero, puesto que el “Shato” no me escucha, ni a mí ni a ninguno de los compis del gimnasio, os paso a vosotros la pelota. Ahí va mi lista de peticiones:

  • Quiero que no haya “rateros” en los vestuarios. A lo largo del año pasado hemos tenido demasiadas visitas de los amigos de lo ajeno. En las taquillas podemos meter la ropa y otros enseres, pero los zapatos, lo lógico es que se queden fuera sin el peligro de que algún “cabrón” se los lleven porque no le gustan los que él calza. Que se compre unos, cojones. ¿A que a nadie le han desparecido unos calzoncillos sudados? Entonces ¿por qué llevarse otras cosas?
  • Quiero que los socios sean más cívicos. Y me explico. Las duchas de los vestuarios están, día sí y día también, llenas de botes vacíos de champú, acondicionador, gel de baño e incluso cuchillas de afeitar. Siempre hay algún capullo que se afeita en la ducha y deja la cuchilla en la bandeja del gel de ducha, y que tarde o temprano se cae al plato de la ducha. Seguro que estos sujetos saben de sobra que en los vestuarios hay papeleras pero resulta mucho más cómodo dejarlos allí y que otros los recojan.
  • Quiero que el suelo de los vestuarios se cubra con rejilla antideslizante. Todos habréis comprobado que es una auténtica pista de patinaje desde el momento en el que se humedece ligeramente. En la zona de aguas hay puesta una rejilla de ese tipo. El problema que tiene es que retiene muchísimo el agua y hay que estar continuamente escurriéndola. Una compañera nuestra resbaló en el vestuario femenino dando un costalazo que por poco no lo cuenta. Afortunadamente solo fue el golpe pero podría haber sido fatal.
  • Quiero que los monitores de la sala de cardio y de pesas sean más “amables” y más explícitos en sus explicaciones cuando alguien requiere su presencia. Están para eso y no para lucir palmito. Cuando alguien hace por primera vez un ejercicio en una máquina determinada no puedes decirle sólo que haga 3 series de 15 repeticiones cada una. Posiblemente la persona que vaya a hacer el ejercicio sepa lo que es una serie y una repetición, pero si no ¿qué pasa? Además tendrá que aprender a usar la máquina, cómo sentarse, como apoyarse, qué peso tiene que levantar las primeras veces.
  • Quiero que las bicicletas de la sala de spinning hayan pasado la ITB (Inspección Técnica de Bicicletas). No quiero bicicletas con los sillines descuajaringados, el apriete de los manillares roto, las bielas de los pedales aflojadas (con el peligro que supone para el que pedalea), los pedales mal apretados, etc. Ojo, que no estoy pidiendo bicicletas nuevas, no. Que lo que quiero es que las que hay estén en condiciones, y que no pase como aquella vez en las que había más bicicletas de cara a la pared que bicicletas en el parqué.
  • Quiero que pongan un tablón en condiciones en la tarima del monitor. ¿Para qué? Para acompañar a dúo al monitor durante la clase. Tiene que ser una experiencia interesante, y que ya se practica en otros centros deportivos. Lo del tablón se habló hará ya casi tres mese y aquí seguimos esperando, como con tantas cosas.
  • Quiero que se coloquen unas cortinas en la sala de spinning para cubrir los ventanales estrechos que hay situados detrás de la tarima del monitor. Así se podrá evitar que en las clases de tarde los cuellos de los monitores se pongan al rojo y la primera fila de bicicletas termine ciega
  • Quiero un equipo de música nuevo y un buen sistema de altavoces. Como dice nuestro amigo Antonio, queremos calidad y no potencia, que esto no es una feria. Que para romperte los tímpanos siempre habrá tiempo pero que no sea montando en bicicleta. A tomar por culo el sistema cuadrafónico de pacotilla que hay instalado, que lo único que falta en la sala es un tío con un micrófono anunciando el perrito piloto y la chochona.
  • Quiero que el gimnasio deje de poner carteles “chorra” por todos los sitios. Carteles que no merecen la más mínima atención porque no aportan absolutamente nada al usuario. En algunos casos lo que sí que aportan es indignación cuando hay otros temas bastantes más importantes por resolver.

Podría seguir haciendo peticiones pero en vista de que hoy es día 7 de enero y voy con cierto retraso, prefiero pararme aquí. Posiblemente alguien añada alguna petición más, pero no seré yo. Esperando que, si no todas, al menos algunas de ellas (por lo menos la del equipo de música y el sistema de altavoces) puedan verse cumplidas, desde aquí os hago una profunda reverencia y os mando un saludo. Que sepáis que aquí todavía se os rinde homenaje, nada de Santa Claus, Papa Noel o como demonios quiera llamarse el gordo de rojo.

viernes

Las matemáticas no engañan

Repasemos las matemáticas básicas de una manera rápida para ver si los números cuadran en la sala de spinning o no. Esto va a ser muy rápido, pero que muy rápido. Veamos, la sala mide aproximadamente 20 metros de largo por unos 15 metros de ancho, lo que hace un total de 300 metros cuadrados (algo me dice que incluso algo más, pero dejémoslo ahí) de los cuales son aprovechables el 60%, más o menos (recordemos que hay pasillos laterales y la tarima del monitor no cuentan como zona útil, basta echar un vistazo al suelo donde la zona de pedaleo está marcada con una alfombra de color oscuro). Este 60% representa 180 metros cuadrados a distribuir entre ¿70 bicicletas? Sí, más o menos. Hagamos números de nuevo, 180 metros cuadrados, 70 bicicletas, eso sale aproximadamente a 2.6 metros cuadrados por bicicleta. Correcto, ese es el área disponible para cada cliente del gimnasio que acuda a la sala de spinning. Sigamos haciendo números, complicándolo un poquito más y entrando en territorio comanche, el que duele al bolsillo. Imaginemos un fatiguilla, de los que paga el año al taco (“mire usted señorita que yo me quiero renovar pagando todo el año y aquí traigo el fajo de billetes, y como no tenía un billete de 500 euros se lo traigo en billetes de 5, así que dedíqueme tiempo y empiece usted a contar o me voy a otro sitio”). El tipo quiere la categoría anual, el día completo, o sea 595,4 euros de vellón por 365 días, que luego no son 365 días. Restemos los fines de semana del mes de agosto, los domingos de los meses de verano que no sean agosto, las fiestas de guardar, etc, en fin, que restando, restando nos quedamos con 330 días más o menos. Si el pavo no falta un solo día al gimnasio, su entrada diaria al gimnasio le sale por la módica cifra de 1.8 euros (300 de las antiguas pesetas). Pero esto no va a ocurrir (aunque los hay) el chorvo faltará algún que otro día. Supongamos nuevamente que el sujeto en cuestión viene 4 días a la semana (que ya está bién) durante las 52 semanas que tiene el año. Eso hace un total de 208 días (con dos cojones) y la media que antes era de 1.8 euros ahora pasa a 2.9 euros (casi 500 pelillas) un aumento del 60%, casi ná. Sigamos imaginando que este pavo, aparte de sus pesas, el tío es un enamorado del spinning y no se pierde una clase cada vez que va al gimnasio. En la sala se encuentra habitualmente con una pelotera de gente que siempre acude a la misma hora (estamos idealizando). Son aproximadamente 30 personas que todas ellas han pagado religiosamente su año (30x595=17850 euros). Pero solo es la hora a la que el muchacho va a clase. Sabemos de buena tinta que el resto de clases tiene una distribución parecida de asistentes, con un bajón importante en las horas mañaneras y en la hora de sobremesa. No importa, hagamos números de nuevo: 25 personas por clase, asistentes habituales por 6 clases diarias a 595 euros anuales cada uno, eso hace un total de casi 90.000 euros. Aquí es donde yo quería llegar, yo entiendo que hay que pagar el ¿mantenimiento? y la ¿limpieza del gimnasio?, hay que pagar los sueldos de las chicas de recepción, de los monitores de las salas, hay que pagar religiosamente las tasas del ayuntamiento (teléfono, agua, gas, electricidad,…) etc. pero esta cifra es ridícula en comparación con lo que el gimnasio debe ingresar anualmente con las cuotas de los socios. Supongamos 5000 socios fijos, que renuevan su abono, un total de 2.975.000 euros (495 millones de pesetas). Me cago en la madre que parió paneque, pero como pueden tener la poca vergüenza de tener en condiciones tan míseras la sala de spinning, con unas bicicletas, algunas de las cuales “se caen a pedazos” y con un equipo que es el hazme reir de la mitad del gimnasio (la otra mitad no asiste a esa sala). Cojones, que poner un equipo de sonido de calidad puede costar ¿cuánto? 3.000 euros, 4.000 euros. ¿Qué inversión supone eso comparativamente con lo que el gimnasio ingresa? Que es 0.13 % de ese ingreso. Que lo estamos pagando todos los que asistimos. Coño, que se gasten el dinero en condiciones y no en maquinitas de la sala de cardio que no utiliza ni el tato (véanse las dos máquinas de remo y la máquina que simula subir escalones). No tengo mucho más que decir. Prefiero desahogarme aquí porque me da la sensación de que cada vez que voy a spinning están continuamente tomandome el pelo, y es una sensación muy desagradable. Espero que este artículo le pique a más de uno. Para eso están los comentarios. A ver quien da más.

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