lunes

Parte 1: Ruta de Puerto Serrano - Olvera - Puerto Serrano

Lo que se perdieron los compis frikis. 76 kilómetros de ruta verde en medio de la sierra con salida en Puerto Serrano, llegada a la estación de Olvera y vuelta a Puerto Serrano. Acojonante. Para amantes de la bici, la naturaleza y el silencio. Pero poco a poco. La jornada no toda fue bicicleta, ni todo fue armonía. Vayamos paso a paso.

El día empezó poco antes de las 8.00 de la mañana cuando el Boss manda un mensaje diciendo que pasa a recogerme y a las 8.05 estamos metiendo mi bicicleta en su maletero junto con la suya. Sin problemas.

La reunión del personal se hacía en el descampado que frente al centro Alcampo, en la ronda del Tamarguillo. Allí llegamos a las 8.20 más o menos. Y ya había gente. Metidos en el coche porque hacía fresquete y con las bicis en los transportines montados en las bacas. Después de esperar media hora, más o menos, y con toda la peña preparada, trincamos los coches y arreando para Puerto Serrano. Antes de llegar al punto de partida se había previsto una parada para desayunar, como no podía ser de otra manera. Y aquí llega el primer punto del día.

Pedimos Antonio y yo los cafetitos para calentar el cuerpo y, a espaldas de Antonio, resuena una voz (digo bien, resuena) bronca, profunda, voz de fumador, ducados, que nos dice: “Vosotros sois los compañeros de Ana ¿verdad?”. Nos miramos y asentimos. El colega, pertrechado de arriba abajo, se está preparando una “palomita” (para los profanos como yo eso es un lamparillazo de anís con agua que puede levantar a un muerto del ataúd) al tiempo que le pega una calada profunda al cigarrillo que casi lo vuelve como un calcetín. Este personaje parecía sacado de un tebeo. Imaginaos al profesor Bacterio (Mortadelo y Filemón) pero sin barba. La conversación la mantiene él exclusivamente, Antonio y yo solo gesticulamos y decimos “Sí” y “No”. Resulta que el sujeto es ex legionario, que ha participado en doscientas mil carreras, en bici, a pie, una máquina (o al menos lo parece, luego los 76 kilómetros lo pusieron en su sitio). Mientras “charlamos” con él se fuma tres cigarrillos, con dos cojones, y luego a la bicicleta, así hay que hacer las cosas.

Superada esta fase inicial, hasta el punto de partida sólo quedaban unos kilómetros. Llegada en tromba de todos los coches a la estación de Puerto Serrano y a descargar las bicicletas. Esto empezaba a ponerse calentito. Preparamos el material, bicicletas, cascos, ropa, zapatillas, bidones, barritas energéticas, etc. Unos máquinas. Por allí veíamos bicicletas de todo tipo, buenas, bonitas, grandes, pequeñas, de paseo, caras, baratas. Y eso sí, la gente con muchísimo ánimo y muchísimas ganas. Y aquí viene el segundo punto del día.

Salimos todos en grupo y cuando miro a mi alrededor no veo al Boss. ¿Y este tío donde se ha metido? Yo sigo para delante. Pasan cinco minutos y este tío que no aparece. Me hago a un lado del carril y al medio minuto pasa el Boss pegando voces. Me cuenta que es que se le habían olvidado en el coche los bidones de agua y se había dado la vuelta para cogerlos. Que como iba a hacer la ruta sin líquido.

El camino discurría por un camino de buen firme, sin grandes desniveles, con unas vistas preciosas, una mezcla de verdes de todas las tonalidades, alternando el marrón pajizo de las hojas otoñales y el gris apagado de los riscos de las montañas cercanas. Este camino es famoso porque atraviesa numerosos túneles, algunos de ellos realmente largos y oscuros, muy oscuros. Con este panorama, alcanzamos la estación de Caripe, donde se hizo una mini parada para esperar a que el grupo se uniera. En solo 15 kilómetros el grupo inicial se había fraccionado en varias partes, a saber el primer grupo, el de los fatigas, el de “yo tengo que llegar de los primeros”, el segundo grupo, el de “vamos deprisita pero sin fatiguear” y el tercer grupo, el de “hoy vamos a salir de paseo y yo quiero ir como Piraña y tú como Tito en Verano Azul”.

Continuará…

2 comentarios:

. dijo...

jeje q bueno eres smaller !!
el profesor bacterio tipo peculiar,.... y como llegó al punto intermedio de Olvera? cuentalo smaller,
porq a nosotros nos hubiera dado tiempo esperando a hacer el cubo de rubik !!,

y el bossssss ay el bosssss q cabeza tiene ya el pobre q tuvo q volverse varios km pa coger los botes de agua!!

q buen dia pasamos !!

pd: el plato de albondigas caseras con tomate al final con dos cervezas, lo mejor !! jejeje

George The Smaller dijo...

Di que sí, Gran Jefe, di que sí. El amigo Bacterio llevaba la copita de añís arrastrando la bicicleta y los ducados en los pulmones. Que no se puede hacer una etapa como esa metiendose lo que ese hombre se metió. Que ya se puede ser superman y, sobre todo, que a ciertas edades el cuerpo no perdona.

Related Posts Plugin for WordPress, Blogger...